¿Qué es?
Preoperatorio
Postoperatorio
¿Qué es la Corrección del Bruximo?
El bruxismo es el hábito involuntario de apretar o rechinar los dientes sin propósitos funcionales; y afecta en menor o mayor grado a entre un 10 % y un 20 % de la población.
Además de desgastar los dientes, conlleva dolor de los músculos del oído, cuello y mandíbula; así como dolor de cabeza.
Aunque el bruxismo se trata habitualmente mediante el uso de férulas de descarga, éstas no siempre ofrecen una solución definitiva.
Este es un tratamiento que permite complementar o incluso sustituir la férula.
Mediante la relajación de la musculatura, se protege del desgaste tanto la dentadura como la articulación. Además, al reducir la fuerza del músculo masetero se reduce también su volumen, afinando el rostro, a menudo ensanchado por la hipertrofia muscular.
Procedimiento
Primero se realizará un estudio de la mordida para evaluar los puntos con más tensión de los músculos oclusores de la mandíbula.
Luego se administra la toxina botulínica en el interior del músculo masetero. Se hará con pequeños pinchazos para repartir el producto en las aéreas de tensión.
Es una técnica prácticamente indolora por el pequeño calibre de las agujas que se requieren, por lo que no es necesaria la aplicación de anestesia local. Sólamente en los casos más sensibles recomendaremos a los pacientes usar cremas anestésicas de uso tópico.
La duración oscila entre 10-15 minutos.
Los resultados empiezan a notarse al cabo de 24-72 hs y, en función del grado de hipertrofia, la reducción de volumen es visible a partir de las 3-4 semanas.
Antes de la intervención
No es necesario seguir ningún protocolo de preparación.
Después de la intervención
El paciente después de la intervención puede hacer vida totalmente normal.
El tratamiento con toxina botulínica requiere de refuerzos periódicos, que suelen realizarse a los 6-10 meses.
